Under Armour confirma su caída: cierra 2024 con un retroceso del 9% en ventas

Under Armour, en crisis. La empresa estadounidense de moda y equipamiento deportivo ha cerrado 2024 con ventas de 5.164 millones de euros, un 9,4% menos que el año anterior, según avanza Modaes. Esta evolución se pudo empezar a intuir el pasado febrero, cuando la marca hizo públicas las cifras de los nueve primeros meses del ejercicio, que confirmaron las primeras pérdidas.
En concreto, Under Armour ha anotado pérdidas de 201,2 millones de dólares el pasado 2024, frente a los 232 millones de dólares que registró el año anterior. La caída ha sido especialmente intensa en su mercado local Estados Unidos, así como en Asia, en línea con la caída del consumo que está experimentando el territorio.
Asimismo, también ha registrado un descenso en Latinoamérica, con una caída del 6,1%, hasta situarse en 215,4 millones de euros. La marca sí que ha conseguido elevar, por su parte, la cifra de negocio en Europa, hasta los 1.086,5 millones de euros, un 0,4% más.
Under Armour ya acumuló pérdidas de 133 millones de euros en los nuevos primeros meses de 2024-2025
Por canales, el descenso sí se ha visto generalizado. Las ventas al por mayor se han contraído un 8,1%, hasta registrar una cifra de 2.978,8 millones de dólares, mientras que el negocio minorista del grupo ha retrocedido un 10,5%, hasta los 2.089 millones de dólares. Por su parte, a través de las licencias, Under Armour ha ingresado 94,5 millones de euros, un 15% menos.
Los accesorios ha sido el segmento que ha terminado el ejercicio con mejores cifras, registrando un incremento del 1,3% de las ventas. Aun así, estos continúan siendo el menor negocio de la compañía, con una facturación de 410,8 millones de dólares.
Tanto la moda como el calzado sí que se han visto afectados. En concreto, la marca ha reducido las ventas de prendas de vestir un 8,9% menos que el año anterior. Por otra parte, el sector del calzado ha descendido un 12,8%, situándose en 1.206 millones de dólares.
Plank fundó Under Armour en 1996 y ocupó el puesto de director ejecutivo y presidente de la junta directiva hasta enero de 2020. En ese momento, la empresa estaba tambaleándose, tanto en términos de ventas como por escándalos, hasta investigaciones del regulador bursátil.